En ocasiones, las prisas por entregar una web, el deseo de complacer al cliente y ahorcarse con cronogramas pueden convertir en un fiasco un buen proyecto de marketing. Hemos de tener muy claro siempre cuál es la prioridad: un trabajo cien por cien profesional y bien hecho en el que todos y cada uno de los detalles han de estar cuidados y mimados. Aprovechar el desconocimiento del sector del marketing on line por parte del cliente para dejar a medio hacer nuestro trabajo dice muy poco de nuestra capacidad y puede causar graves perjuicios en la imagen de marca tanto nuestra como de los otros.