En ocasiones, las prisas por entregar una web, el deseo de complacer al cliente y ahorcarse con cronogramas pueden convertir en un fiasco un buen proyecto de marketing.  Hemos de tener  muy claro siempre cuál es la prioridad: un trabajo cien por cien profesional  y bien hecho en el que todos y cada uno de los detalles han de estar cuidados y mimados.  Aprovechar el desconocimiento del sector del marketing on line por parte del cliente para dejar a medio hacer nuestro trabajo dice muy poco de nuestra capacidad y puede causar graves perjuicios en la imagen de marca tanto nuestra como de los otros.

Por ello, vamos a señalar una serie de errores que no se deben cometer jamás a la hora de hacer una presentación tanto de una web corporativa como de cualquier otro trabajo de marketing:

  1. No des por supuesto que tu cliente sabe menos que tú. Aún caso de que así fuese, tu obligación es ilustrarlo, ofrecerle el mejor servicio y proyectar para su marca profesionalidad digital a todos los niveles.  Recuerda que quién va a ver tu trabajo será su clientela y tus errores se convertirán en sus errores. El daño que le causes, además de imperdonable, redundará en tu empresa.

 

  1. No esperes al último momento.  Cuando hayas de hacer presentaciones, remates de web on line o cualquier tipo de trabajo, asegúrate de tenerlo, testado y correctamente enlazado antes de mostrárselo a tu cliente. Una entrega deficiente es una imagen lamentable y denota falta de profesionalidad.

 

  1. No dejes en manos de terceros los recursos:   Habitualmente, los recursos (creatividades, documentación, etc.) que llegan a través de las empresas tardan en hacerlo o son muy deficientes. Si bien cualquier dato o información te será muy útil, intenta ser proactivo y autoabastecerte o la evolución de tu trabajo se verá muy mermada. Y recuerda, pide mucho o no recibirás casi nada…